El verano es posiblemente la temporada más esperada del año. Disfrutar de sus cálidas temperaturas, el cielo azul y un sol radiante son sinónimo de vacaciones , y sí! la diversión está al aire libre: playa, bbq’s, parques, lagos, caminatas… una invitación a divertirnos bajo el sol.
Para que la felicidad se prolongue y no se vea arruinada por quemaduras e insolaciones, existen ciertas recomendaciones para proteger y cuidar la piel en esta época del año y prevenir posibles alteraciones en su salud.
Hidratación
Durante estos meses el agua es la mejor aliada. Una piel saludable se nutre de adentro hacia afuera, por lo tanto 8 vasos de agua diarios son la norma mínima.
Como complemento a esta práctica, se debe multiplicar la aplicación de cremas y lociones hidratantes, la recomendación es aplicar al menos tres veces al día, si es posible.
“Aplicar la crema corporal una vez afuera de la ducha, ayuda a retener la humedad en el cuerpo para lograr una completa hidratación”
Exfoliación
Algunas personas le temen a la exfoliación debido a la textura rugosa de la mayoría de los productos, sin tener en cuenta que esa es la intención. Este tratamiento elimina los restos muertos y opacos de la piel para evitar la congestión y mejorar la hidratación de los tónicos y humectantes.
Sin estas impurezas bloqueando los poros, los productos hidratantes tienen mejor penetración. Puede realizarse una vez cada 3 días, seguida de
una correcta hidratación.
Protección
Aunque suene extremo el bloqueador solar debe aplicarse cada 3 horas como máximo intervalo. El verano es la temporada más calurosa del año porque el sol se encuentra en un ángulo de 90% en el cielo y se mantiene allí durante más horas.
La buena noticia es que la tecnología de hoy ha desarrollado un bloqueador solar para cada tipo de piel. Eso significa que es posible elegir fórmulas sin aceite, mates, fórmulas con emolientes adicionales para la piel seca, o fórmulas libres de químicos para pieles sensibilizadas y reactivas.
¿Qué hacer ante una quemadura por el sol ?
En caso de haber olvidado alguno de los pasos anteriores y sufrir de una quemadura solar, la mejor solución es recurrir a geles refrescantes con ingredientes botánicos como el aloe vera, preferiblemente, para prevenir la descamación y reducir la inflamación.
“Una quemadura de sol abrasadora duplica el riesgo de sufrir de melanoma – el tipo más grave de cáncer en la piel. Recuerde que debe realizarse un examen médico anual de la piel y complementarlo con un autoexamen frecuente en busca de nuevos lunares, abultamientos o cualquier cambio de la dermis”
También puede leer: Moldeamiento de nariz sin necesidad de cirugía
